#47. Cómo saber si eres frágil. Aprende a evitarlo.
No es cosa de viejos.
Y es muy frecuente.
Muchas personas son frágiles… y no lo saben.
La importancia de esto radica en que es una condición que perjudica mucho tu salud.
Te explico cómo puedes saber si eres frágil, y cómo ponerle remedio.
A medida que envejecemos, nuestro cuerpo cambia. Es evidente. Sin embargo, estos cambios serán más o menos profundos en función a nuestras acciones cotidianas, en función a nuestro estilo de vida. Como siempre, tu cuerpo se adapta a tu vida, también en tu forma de envejecer.
"Tu cuerpo se adapta a tu vida, también en tu forma de envejecer"
El problema es que si no haces nada para remediarlo, estos cambios conducen a un estado que en Geriatría se conoce como “fragilidad”, en el nos volvemos más vulnerables y más propensos a enfermar. En esta situación, tenemos más probabilidades de sufrir caídas, infecciones, discapacidad y de desarrollar enfermedades crónicas. Lo que no sabíamos hasta hace poco era que esta fragilidad también aumenta el riesgo de enfermedad de corazón.
Hoy lo tenemos cada vez más claro.
Como sabes, las enfermedades cardiovasculares (ECV) son una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo. A medida que envejecemos, el riesgo de desarrollar estas enfermedades aumenta. Sin embargo, a menudo no se tiene en cuenta que la fragilidad juega un papel crucial en la aparición de estos problemas de salud.
En esencia y simplificando mucho, ser frágil significa que nuestro cuerpo tiene menos resistencia y menos "resiliencia" para enfrentar el estrés físico y fisiológico. En el contexto de las enfermedades cardiovasculares, esto significa que una persona frágil tiene menos capacidad para soportar un aumento en la presión arterial, mantener una circulación sanguínea adecuada a los requerimientos puntuales del cuerpo o recuperarse de un daño en el corazón o los vasos sanguíneos. A medida que el cuerpo pierde fuerza y vitalidad, se vuelve más susceptible a sufrir problemas cardíacos y vasculares, incluso con estímulos menores que una persona más fuerte podría superar sin problemas.
El concepto de fragilidad no solo se refiere a una debilidad física evidente. Se trata de un síndrome complejo que abarca pérdida de masa muscular, disminución de la movilidad, cansancio excesivo, problemas cognitivos y dificultades para realizar tareas diarias. Y, cuanto más frágil se vuelve una persona, mayor es el riesgo de que desarrolle enfermedades cardiovasculares graves. Y es que numerosos estudios han identificado la fragilidad como un factor de riesgo importante para las ECV.
Además, recientemente se ha publicado un estudio que nos ha enseñado cómo los cambios en la fragilidad, ya sea su empeoramiento o mejoría, afectan directamente el riesgo de desarrollar una enfermedad cardíaca o un accidente cerebrovascular. Y te lo voy a explicar, porque es sorprendente, no va en la dirección que crees. Mira.