#72. Guía para elegir una buena proteína.
Carne si, carne no…
Pescados azules para el omega 3, carnes rojas para aportar gran cantidad de nutrientes.
¿Qué fuente de proteína es mejor para tu salud?
¿Cómo es, el pescado por ejemplo, comparado con otras fuentes de proteína?
Acompáñame a la velada del año.
Te lo cuento.

El debate sobre lo saludable que es la carne, el pescado, o las fuentes de proteína vegetal está en plena efervescencia.
Y es que cada vez somos más conscientes del impacto de nuestros hábitos en nuestra salud, y los estudios en nutrición han avanzado mucho en los últimos años. Pero claro, los estudios hay que hacerlos… y saber leerlos, para sacarles jugo.
En el artículo de hoy revisamos cuáles son los efectos de la carne, el pescado y las proteínas vegetales en la salud, evaluando lo que nos dice la evidencia cuando los comparamos entre ellos.
¿Qué entiendo yo por una alimentación óptima?
Como médico, entiendo que una alimentación óptima es, por un lado, aquella que aporta una cantidad de macro y micronutrientes suficiente como para que mi cuerpo funcione a la perfección a corto y largo plazo, además debe de ayudar a mantener un estado de salud máximo, y por último, esta alimentación debe de ser agradable al gusto, debe de estar rica, claro. En cierto modo, podríamos decir que una alimentación óptima sería aquella que nos hiciera vivir mas y mejor en ausencia de enfermedad.
Y así, a la hora de seleccionar los alimentos de una alimentación óptima, deberíamos de tener claro cómo afectan a nuestra salud. Es decir, deberíamos considerar si el consumo de unos alimentos u otros nos afectan de manera positiva o negativa.
Ahora bien, los alimentos de origen animal están en entredicho. Porque muchas voces alertan de que su consumo aumenta la incidencia de enfermedades cardiovasculares y de cáncer.

¿La carne aumenta tu riesgo de enfermedad?
El argumento principal de los defensores de una alimentación basada principalmente en alimentos de origen animal es la la densidad nutricional que presentan las fuentes de alimento animal. Por ello, alimentos como la carne roja, blanca o los pescados son ensalzados.
Sin embargo, en artículos como este, la carne roja no sale muy bien parada en resultados de salud, especialmente a nivel cardiovascular. De hecho, diversos estudios epidemiológicos apuntan a que el consumo elevado de carne roja y carne roja procesada está relacionado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer.
Por tanto, tendría sentido limitar el consumo de carne roja en nuestra dieta.

¿Y qué pasa con el pescado y la carne de aves?
Me he puesto a estudiar. Mira, en un gran análisis comparativo los investigadores evaluaron los efectos del consumo de distintos tipos de carnes y pescado en la mortalidad.