#42. 4 minutos de ejercicio al día reducen un 30% tu riesgo de cáncer.
El paciente con cáncer es un paciente frágil.
Es débil, y no debe hacer esfuerzo físico.
Y así ha sido el paciente oncológico para el sistema sanitario.
Afortunadamente, esto ha cambiado, pues hoy sabemos que el ejercicio físico es un pilar para la prevención y tratamiento del cáncer.
4 minutos de ejercicio al día reducen un 30% tu riesgo de cáncer (comparado con el sofá)
Te cuento por qué, y cómo. Acompáñame.
Este año el cáncer se ha igualado a la enfermedad cardiovascular como principal causa de muerte en España.
Si bien se han hecho grandes avances en su tratamiento, la prevención no inyectable (o dicho de otro modo, todo lo que no sean vacunas o estrategias no rentables por la industria farmacéutica) es la gran olvidada por el sistema, a pesar de ser la mejor estrategia para reducir la aparición de cáncer.
Y es que el ejercicio físico ha demostrado ser clave pero cuidado, fíjate: tanto para la prevención del cáncer como para el funcionamiento de los tratamientos oncológicos y el pronóstico de los pacientes. En este artículo, nos centraremos en cómo el ejercicio físico puede influir en la incidencia del cáncer y sus beneficios durante el tratamiento y curso de la enfermedad.
ENTENDIENDO EL PROBLEMA
El cáncer es la segunda causa principal de muerte a nivel mundial, con aproximadamente 10 millones de muertes al año, lo que representa alrededor de 1 de cada 6 muertes. Cada vez somos más conscientes de los beneficios del ejercicio físico, y de todo lo que este puede hacer por nosotros.
Sin embargo, el paciente con cáncer ha sido considerado un paciente, frágil, débil, y que no debe de someterse a esfuerzos. Afortunadamente, la ciencia avanza, y algo está cambiando. Al hablar de cáncer, el ejercicio es YA TU MEJOR ALIADO.
De hecho, la evidencia empieza a ser tan contundente que cada vez son más las recomendaciones del personal sanitario para implementar el ejercicio físico en pacientes con cáncer. Y es que así, se pueden evitar muchos problemas asociados al cáncer.
CUANDO EL CÁNCER YA HA EMPEZADO
Además de su papel preventivo, la actividad física también puede ser beneficiosa para quienes ya han sido diagnosticados con cáncer. Diferentes estudios han demostrado que el ejercicio mejora la calidad de vida y aumenta la supervivencia en pacientes oncológicos, y esto no queda aquí.