#76. Síndrome Metabólico: el enemigo de la salud moderna.
Cada vez vivimos más.
Sin embargo, vivimos más enfermos.
La enfermedad, de repente, se ha cronificado. Nos mata… pero lentamente.
Y hay algo detrás de esto, de lo que muchos hablan pero sin entenderlo completamente: el síndrome metabólico.
¿Qué es? ¿Se puede evitar?
Te lo cuento.
Por diversas causas, enfermedades como la diabetes, la hipertensión o la enfermedad cardiovascular son hoy compañeras inherentes al hecho de cumplir años. Afortunadamente no es algo genético, como vimos aquí, pero estar, están. Y en la base de la mayoría de los casos subyace una disfunción de nuestro metabolismo que es determinante para que aparezca una resistencia a la insulina patológica, un aumento de presión arterial o alteraciones perjudiciales del colesterol. A esta disfunción la hemos llamado síndrome metabólico.
¿Qué es el síndrome metabólico?
El síndrome metabólico (a partir de ahora SM) es el conjunto de condiciones que aumentan el riesgo de sufrir un evento cardiovascular, como un infarto o un ictus. En medicina, lo definimos como la combinación de obesidad (especialmente de tipo central), hipertensión, alteraciones del colesterol y dificultad para regular la glucemia (el “azúcar”) en sangre.
Sabrás, o te sonará al menos, que cada una de estas condiciones ya aumenta el riesgo de sufrir un infarto. Pues bien, cuando varias están presentes, el riesgo se multiplica, y se eleva muchísimo la probabilidad de que aparezcan enfermedades como la diabetes tipo 2, un ictus o enfermedad de las arterias del corazón.
Para definir el SM, distintos organismos nos dan sus criterios y puntos de corte, que aunque varían entre ellos, son siempre muy parecidos. En esencia, lo que define el SM es la combinación de obesidad abdominal, intolerancia a la glucosa, hipertensión arterial y colesterol.
Los criterios diagnósticos más utilizados son los propuestos por la NCEP-ATP III, según los cuales, el síndrome metabólico se produce si se cumplen 3 de las siguientes 5 condiciones:
Es cada vez más frecuente… en jóvenes.
Entre un 13% y un 31% de los adultos tiene síndrome metabólico. Y aunque su prevalencia aumenta con la edad, lo peor es que el SM se presenta cada vez más en niños y adolescentes, en buena parte debido al aumento en las cifras de obesidad infantil.
Cuando el SM aparece, se genera un estado inflamatorio crónico de bajo grado, caracterizado por niveles elevados de proteína C reactiva y de citoquinas como la interleuquina-6 o el factor de necrosis tumoral (TNF)-α. Y es precisamente dicha inflamación sistémica la clave para la aparición y progresión de enfermedades crónicas como la diabetes, la enfermedad cardiovascular, el hígado graso y algunos tipos de cáncer.
Pero tranquilo, hay buenas noticias. Cuando aparece, aún estás a tiempo.