#23. Smartwatches, ritmo cardiaco y arritmias. ¿Son un engaño?
El marketing a su alrededor es tremendo.
El mejor aliado para hacer ejercicio, tu propio entrenador personal, tu mejor monitor de cuánto descansas.
Y ahora, detectores de arritmias y de ritmo cardiaco.
Pero… ¿es esto cierto?
Te analizo todo lo que sabemos al respecto. Acompáñame.
Estamos viviendo una auténtica revolución digital en el ámbito de la salud, que ha traído consigo avances tecnológicos que prometen transformar la manera en que monitorizamos y gestionamos nuestra salud cardiovascular.
Entre estos avances, los relojes inteligentes o smartwatches han emergido como herramientas que prometen la detección temprana de arritmias y otros cambios eléctricos a través de la piel indicativos de enfermedad de corazón, diciendo que pueden incluso detectar un infarto de corazón en curso.
Estos dispositivos dicen ser capaces de realizar un seguimiento continuo y no invasivo del ritmo cardíaco en la vida cotidiana, fuera del entorno clínico tradicional. Y lo cierto es que así es… en cierto modo. Algunos smartwatches sí que pueden realizar un electrocardiograma, aunque no tan completo como el clásico electrocardiograma que usamos los médicos para detectar arritmias. No obstante, esto sí que ha abierto nuevas vías para la detección de algunas arritmias. En concreto, de la fibrilación auricular, la arritmia cardíaca más común, y otros trastornos del ritmo cardíaco que, si no se tratan, pueden aumentar significativamente el riesgo de eventos cardiovasculares adversos, como el ictus.
Pero, ¿qué nos dice la evidencia científica?, ¿realmente estos aparatos son tan precisos como para fiarnos de ellos en la práctica clínica? Veamos.
¿Cómo registran los smartwatches nuestro ritmo cardiaco?
Desde un punto de vista tecnológico, existen dos tipos de sistemas distintos integrados en los dispositivos inteligentes:
- Por un lado, la fotopletismografía, que se basa en la señal de presión generada por el pulso sanguíneo en las arterias de la muñeca. Esta señal genera unas ondas de pulso de las que se puede analizar tanto la regularidad del intervalo entre impulsos como la morfología generada por el propio impulso. Es similar a lo detectado a través de un pulsioxímetro de dedo.
- Por otro lado, relojes más modernos cuentan ya con la tecnología para realizar una electrocardiografía. Ahora bien, la realizan tan solo de una única derivación (ahora te explico esto). De todos modos, esto si que permite evaluar directamente la actividad eléctrica generada en el corazón a lo largo del ciclo cardiaco.